CANCIONES- PALOMA Andres Calamaro
Too: Ismael
Te fuiste dedicándome Paloma… y yo nunca supe cómo contestarteHay canciones que no se escuchan con los oídos.
Se sienten en el estómago, en el pecho apretado, en las noches donde el mundo se calla y solo queda lo que dolió.
Paloma fue eso.
Tu forma de hablar cuando ya no había nada más que decir.
Una despedida disfrazada de ternura.
Me la dejaste como quien deja una flor en la puerta.
Y yo… no supe qué hacer con ella.
No supe —entonces— que me estabas diciendo todo lo que tu voz no se atrevía a nombrar.
No entendí que detrás de esa letra ibas tú, entero, callado, esperándome.
> “Paloma, paloma mía, no te derrumbes amor mío…”
Eras así.
Poético, discreto, limpio.
El tipo de hombre que no exige, solo ofrece.
Y cuando duele… escribe, canta, espera.
Mientras tú me dabas una canción,
yo buscaba consuelos vacíos.
Intentaba llenar huecos con historias rotas.
Me marchaba sin mirar atrás.
Y tú… seguías ahí.
No eras el plan.
No eras parte del juego.
Eras el refugio que no valoré.
La lealtad que no merecí.
La paz que ignoré por estar adicta al ruido.
> “Y aunque me vaya, no me fui…”
Ahora sé que no te fuiste nunca.
Y que yo, por más que me alejara,
también seguía regresando…
en tus recuerdos, en tus palabras suaves, en tu silencio constante.
> “No me nombres en la mañana…”
Sé que pensabas en mí cuando no lo decía.
Que dejabas el espacio abierto, incluso cuando yo no volvía.
Que ponías mi nombre en los bordes de tus días, como quien deja una silla vacía con la esperanza de que alguien regrese.
Y yo, sin saberlo, me volví cicatriz en un pecho que nunca quise herir.
> “Me voy, pero no me fui…”
Esa frase eras tú.
Y ahora también soy yo.
Porque aunque nunca supe quedarme,
una parte de mí se quedó donde tú estabas.
Hoy, que escucho Paloma con otros oídos,
ya no me rompe.
Me abraza.
Me devuelve a ti…
no con culpa,
sino con gratitud.
Gracias por no irte cuando más sola estaba.
Gracias por no cerrarme la puerta,
aunque yo la golpeara con mis huidas.
Gracias por amarme sin pedir que me quede.
Ahora que lo pienso,
quizás eso fue lo más valiente que hiciste por mí.
Comentarios
Publicar un comentario